domingo, 27 de abril de 2008

A 30 años de la diosa de la luna.

Leonardo Bastida Aguilar
Fotografías Iván Bastida Aguilar

Desde el año de 1978, año en que se descubre a la diosa mexica Coyolxauhqui, los estudios sobre cultura mexica tuvieron un giro radical. A partir de este año la fisonomía del Centro Histórico de la Ciudad de México tuvo una metamorfosis. Salieron a la luz los restos del Templo Mayor.

Esta deidad mexica es de suma importancia para la cosmovisión mexica. Es ella quien es aventada del cerro y cae desmembrada al pie de este. Esta imagen quedará inmortalizada hasta nuestros días y se puede apreciar en Coyolxhauqui y el Templo Mayo. 30 años reconstruyendo el pasado. 1978-2008.

En esta muestra se presentan 90 piezas extraídas de la zona arqueológica de Templo Mayor. Sin embargo, el mayor atractivo es el poder apreciar el original de Coyolxauhqui bajo luces especiales que recrean su cromática primaria, compuesta por rojo, ocre, azul, blanco y negro,

A su vez se exhibirá una replicada coloreada de la escultura con el fin de que el asistente pueda apreciar los colores originales del monolito. Además se podrán observar testimonios gráficos de las distintas fases de investigación en la zona de Templo Mayor, las cuales abarcan hasta el descubrimiento del monolito de Tlaltecuhlti. Coyolxhauqui y el Templo Mayor. 30 años reconstruyendo el pasado. 1978-2008 permanecerá en el Museo de Templo Mayor, Centro Histórico de la Ciudad de México, hasta agosto de este año.

No hay comentarios: